BELLEZA Y HUMILDAD
La belleza no necesita ayuda,
está, se juega todo en tu mirada. En
tu humildad.
El sonido sublime,
la paz del
corazón. Existe, está contigo.
Puedes.
Sabrás comprender lo más,
allí, donde palpitas
vida y amor, tu designio.
En esta pupila de corcel
anida la ternura.